Hoy vengo a recordarte que es por ti y para ti. ¿Lo sabías?
Me explico un poco más.
Aquello que avances en reconocerte y reencontrarte liberándote de lo que hoy no te permite seguir tu camino como te mereces es por y para ti.
Observo que a menudo las personas a quienes acompaño en las primeros encuentros del acompañamiento me hablan de cómo viven los conflictos presentes en ese momento y las aspiraciones del proceso se centran en encontrar respuestas sobre esos conflictos que viven en esa relación o situación que les han impulsado a tomar acción.
Sin embargo, según avanza el proceso el enfoque va cambiando con la vivencia de que todo aquello que van liberando y los tesoros que van reconociendo son por y para ellos, en su beneficio.
Porque toda transformación que vivas en ti es por y para ti, para la limpieza y construcción de tu hogar interno, el que siempre has habitado y habitarás toda la Vida.
Y desde tu hogar puedes acoger e iluminar a las personas con quienes compartas tu vida y también todo aquello que ocurra.
Recuerda que las respuestas encontradas, las nuevas verdades que escuchas, los nuevos recursos iluminados, las nuevas versiones que incorpores de ti mismo son por y para ti, y permanecerán en ti hasta que de nuevo tome una nueva forma.
Sí… “sólo el cambio es constante” como dijo Heráclito.
Recuerda que el compromiso es contigo. Es tiempo de amarte.
