Como te decía en la anterior publicación hay un pequeño gran matiz que tiene en sí el poder de “cambiarlo todo” en nuestras transiciones, en nuestra Vida.
Es aquello a que tras soltar, transformar, reiniciar, se revela como lo único que permanece…. tu esencia, el Amor que Eres en sus diferentes expresiones.
Situarnos internamente en ese “suelto por Amor a mí y con Amor a ti” es el pequeño gran matiz que Todo lo hace más amable y más en Paz dentro y fuera de nosotros.
El Amor llena las transiciones de Responsabilidad, Verdad, Libertad y facilita el camino hacia tu Paz interna.
Quizá hayas vivido transiciones en las que los protagonistas han sido la prisa, el miedo, el apego, la falta de claridad en la comunicación en ese soltar… en definitiva: el dolor. Y ya sabemos cómo se viven así “las cosas”.
No te mereces vivir tu vida con estos protagonistas y mucho menos los momentos de transición más importantes que suelen ir acompañados de suficiente incertidumbre e intensa vulnerabilidad ¡como para añadir más que sí se puede evitar!
Así, esta es una invitación a cuidar tus transiciones, tus cambios, tus duelos por Amor a ti y con Amor hacia los demás.
¡Y qué alegría que vivirlo así esté en tu mano! ¿no te parece?
¿Tienes experiencia de cómo cuando el Amor es el protagonista el tránsito es más sencillo?.
Con Amor, hasta lo que en un momento podemos sentir muy doloroso tiene una transformación más amable.
¡Te leo en los comentarios!
